Publicado el 14/10/2021
Ante la falta de contenedores, exportadores e importadores analizan seriamente la posibilidad de embarcar sus mercaderías en buques que transportan carga suelta directo a bodega.
Durante el año 2021, la falta de espacio y de equipos generó enormes trastornos en la cadena de suministro. Para evitar repetir la historia durante el 2022,los embarcadores evalúan firmemente aquella opción.
Muchas de las mercaderías que hoy son embarcadas que hoy son embarcadas en contenedores, en el pasado lo eran en forma regular en bodega. A modo de ejemplo: en el caso de las exportaciones argentinas, los embarques de algodón y los de madera aserradas, eran embarcadas de esta forma. Con los años, fueron paulatinamente cambiando al contenedor; pero hoy, ante la falta de espacio y equipos, y por tratarse de cargas de mucho volumen, mucho peso y poca capacidad de pagar costos de fletes altos, son las primeras cargas en ser rechazadas o roleadas.
La alternativa de cargar en bodega no es tan fácil, ya que muchos de los recibidores acostumbrados a tomar sus cargas en contenedores, se resisten a cambiar su logística.
Esta semana se conoció que Coca Cola había fletado tres buques graneleros: el Weco Lucilia C de 35.000 DWT (deadweight) , I Aphrodite M que tiene una capacidad de 34.400 DWT y el Zhe Hai 505 de 35.100 DWT para mantener sus suministros y trasladaron más de 60.000 toneladas de carga. El volumen total de carga era su equivalente a 2.800 TEUs que tradicionalmente, se habrían enviado con las líneas navieras.
Claramente la bodega no es lo ideal, pero es una alternativa. Y ante la situación de caos logístico, ninguna alternativa puede ser descartada.
Los mantendremos informados.
ULC
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